¿A dónde fué a dormir mi estrella, Vía Láctea?

Si alguien preguntara
a dónde ha ido papá,
decid tan sólo:
“Tenía cosas que hacer
en el otro mundo».

 

140406_kyoto_04

9 de octubre. Te has ido de mi lado para siempre. Perder a tu padre no es fácil, hacerlo tan pronto es aún más difícil. Llueve dentro de mí como jamás lo había hecho, es un dolor inigualable, inimaginable por quien no lo ha padecido. Es un sentimiento de vacío, un dolor punzante en el corazón. Me siento cayendo por un precipicio sin fin. Me siento abandonada a mi suerte en una gran ciudad desconocida en la noche. Te veo en todas partes. Te siento, te escucho todo el tiempo, como si estuvieras aquí, como si nada hubiera cambiado desde el sábado por la tarde en que me despedí de ti como un día más.

Sin duda este es el momento más difícil que me ha tocado vivir. Sé que tú viviste esto y cosas mucho peores y aún así no dejaste de trabajar nunca. Ni un solo día. No faltaste a trabajar ni un solo día por enfermedad, ni por nada. Aquí estabas, hecho polvo algunas veces, pero no cejabas. Eras tan grande, tan fuerte, tan perseverante, tan luchador, tan generoso, tan bueno, que imaginar mi vida sin ti se me hace imposible.

Después de todo, estas son paradas que hay en el camino. Tienes que pasar por la fuerza, no queda otra. Algún día, antes o después, llega. Solo sé que tú hiciste lo que quisiste hasta el último momento, de hecho te fuiste mientras jugabas con tus amigos a las cartas. Papá, no hubiese imaginado un final mejor para ti, rodeado de tus amigos y pasándolo bien como a ti más te gustaba. Lo que pasa es que para los que nos quedamos es muy duro, pues te has ido antes de cumplir 60 años. Ya te vale, papa.

Ahora me quedo aquí, con 26 años, siendo una niña a la que le toca apechugar a la fuerza. Sé que tú confiabas en mí al máximo, me lo dijiste muchas veces. Que yo era inteligente, que era fuerte, que yo sabría hacerlo todo, que tú confiabas en mí. Ahora yo te represento en este lugar. Antes escribía los mensajes por ti, llamaba por ti y te representaba. No dudes que ahora seguiré haciéndolo lo mejor que sepa y pueda, solo espero encontrar la fuerza. Cuando tenga una duda, como antes siempre te preguntaba a ti, no me quedará otra que buscar la respuesta dentro de mí e imaginar qué me habrías dicho tú que hiciera.

Papa, esto va a ser muy duro y muy difícil. Te voy a recordar todos los días de mi vida, todos los momentos que hubiese querido compartir contigo me harán acordarme de ti.

Eres la mejor persona que jamás haya conocido: perseverante, generoso, trabajador, cariñoso y siempre pensando en el bienestar de los demás, casi nunca en el tuyo propio. Mis hijos te conocerán mejor que yo, porque no dejaré de hablarles de ti y de lo bueno que eras. Eres y serás mi ejemplo en esta vida, mi guía aún en el vacío que dejas. Gracias por tanto, papá, gracias por tanto y por dejarte la piel por mi y por todos tus seres queridos. Todos te recuerdan riendo, contando chistes, hablando de esa forma tan graciosa. Dejas un recuerdo precioso, papá, tu esencia está en cada rincón de nuestra tienda, no tengas duda de que entre todos continuaremos tu trabajo y cuidaremos esto que tanto te ha costado conseguir.

Te quiere muchísimo tu única hija y la persona que más te quería y te quiere en este mundo,

Desirée.

______

Ayer fue un día muy difícil. Enterré a mi padre por la mañana. Por la tarde fui a Kendo. Hoy estoy en su tienda intentando tirar hacia delante.

No puedo decir mucho más, solo agradecer a tantas personas que se han acercado a darme su calor, su cariño y su consuelo. A mis compañeros de Kendo por acompañarme en este entrenamiento tan difícil pero tan necesario e importante para mí. Intentaré continuar, aunque ahora estoy en un barco emocional muy doloroso.

Gracias a todos (tanto los que salís como los que no salís en esta foto) y como me dijo mi senpai: ¡Fuerza y Kendo!

14650083_535668503305021_8850526332698974962_n

11 Respuestas a “¿A dónde fué a dormir mi estrella, Vía Láctea?

  1. Apreciada Desi. Me alegró mucho verte en el dojo ayer, fue un sorpresa muy grata y una lección para muchos de nosotros. Un cálido saludo y mucho animo

    • Gracias Toni, nunca olvidaré el que vinieras al tanatorio a acompañarme en un momento tan difícil. Me hicisteis sentir arropada y protegida. Nos vemos en el Dojo, un abrazo grande.

  2. Hola Desi.
    Acabo de leer el escrito sobre tu padre. Que bonito.
    A mi me ocurrió exactamente lo mismo . De repente desapareció y a la misma edad que tu, tuve que coger su negocio en sólo un día,
    Al principio lo ves una montaña muy grande , pero con el tiempo ves que es un camino mas , sobretodo si no estas sola.
    Cuenta conmigo para cualquier cosa
    Pedro.

    • Gracias, Pedro. Entonces entiendes de primera mano mi situación en este momento. Me consuela saber que no estoy sola. Un abrazo muy grande, nos vemos en el Dojo.

  3. Hola Desi yo lo perdí el año pasado con 21 años, no he podido evitar llorar al ponerme a leer esto y sinceramente no he podido terminar de leerlo, lo siento. Si necesitases hablar cuenta conmigo. Ánimo, mucha fuerza y Kendo!

    • Lo siento muchísimo, Miguel. Mi único consuelo es que no estamos solos y que de una manera u otra, al final todos acabamos comprendiendo lo que significa este dolor. Nos tenemos mutuamente. Un abrazo grande y gracias por dedicarme estas palabras.

  4. Desirée… perdí a mi padre cuando yo tenía 24 años y él sólo 48, así que sé del dolor y la sensación de vacío que estás sintiendo. Cada uno es diferente y lo vive a su manera, pero me atrevo a aconsejarte que te centres sólo en lo bueno, que rías y llores todo lo que quieras y necesites. La fuerza ya la tienes, así que no intentes serlo más aun.

    Lo siento mucho, de verdad. Un abrazo, de todo corazón.

    • Gracias, Alberto. Es una situación terrible y desoladora, tú lo debes saber bien. Te agradezco de corazón tus palabras, cada gesto y cada mensaje me alivian este sufrimiento, créeme. Gracias de todo corazón por molestarte en escribirme. Un abrazo grande.

  5. Preciosas palabras Desi, se me encoge el corazón de ir sitiendo el dolor en tu relato…pero también leo esperanza y fuerza, sé que es muy duro, pero no estás sola, cuando caigas estaremos a tu lado para ayudarte a levantarte porque te apreciamos mucho. Mucho ánimo y fuerza, no dejamos de pensar en ti. Un abrazo gigantesco.

    • Gracias, Eli. De esta terrible experiencia también he aprendido muchas cosas. Sobre todo un lado humano que no había conocido jamás de manera igual. Los que habéis estado consolándome y apoyándome, sentados a mi lado, tenéis un lugar en mi corazón para siempre. Gracias por todo, espero veros pronto y reír un rato. Un abrazo.

  6. no te conosco puryficaccion me mando esto para leerlo y al leerlo estaba escuchando a mi papa parecia q esa carta la escriviera yo connla diferiecia q yo tengo 44 y mi papa tenia 74 muy guapo el, mi chulo de decia se fue en un momento sin pensarlo, la vida es hasi, hase 4 años d eso y aun lo sigo extrañando como el primer dia, dos años despues mi mama murio en un dia de navidad ya no tengo amis padres y duele mucho pero saves dios te alludara aseguir adelante y tu papa de sierta manera tambien lo ara yo aun los sueño y me da gusto verlos en mis sueños.
    dile a tu papy cuando ballas a dormir q nececitas verlo el se escurrira entre ellos y lo veras vas aver que si..
    dios te bendiga siempre.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s