
Ilustración de Marcos Labrunée para Kendo Blog©.
Los Kendokas somos personas afortunadas. Realizamos una actividad que nos apasiona y que además se traduce en bienestar físico y psicológico. Es una bendición, pero personalmente, yo apuntaría la siguiente premisa: «No hagas Kendo para estar en forma. Debes estar en forma para practicar Kendo». El objetivo de la práctica de Kendo ya lo hemos tratado alguna vez en este blog y aunque es inevitable que la práctica se traduzca en ciertos beneficios a nivel físico y de salud, creo que es interesante ir más allá y mejorar para poder rendir mejor en Kendo.
Nota aclaratoria: antes de empezar, me gustaría apuntar que yo no soy una profesional sanitaria, dietista-nutricionista ni graduada en actividad física y deporte. Esto significa que hablo desde mi propia experiencia y este post es mi opinión personal. Antes de hacer experimentos, lo mejor es que acudas a un profesional sanitario que te guíe y recomiende lo mejor para ti. Dicho esto, vamos allá.
Es un hecho que en España hay cada vez más problemas de salud que están directamente relacionados con el estilo de vida y la alimentación. Esto se traduce en que prácticamente seis de cada diez españoles padecen exceso de peso y vamos acercándonos cada vez más a las cifras (alarmantes y muy preocupantes) de Estados Unidos donde el procentaje asciende a un 75% de la población.
Está claro que el hecho de que hagamos Kendo denota que, probablemente, muchos formemos parte de la excepción y sí estemos preocupados por llevar un estilo de vida saludable, pero no es así en todos los casos. Mucha gente cree que por hacer Kendo dos días a la semana, tiene vía libre para comer lo que le de la gana y ser sedentario el resto del tiempo, cosa que en mi opinión es un error que afecta negativamente al desarrollo y el avance en la práctica.
Elementos que creo que son interesantes para mejorar el rendimiento en Kendo:
- Llevar una alimentación saludable.
Esto no significa seguir ninguna dieta milagro. Elimina eso de tu cabeza ya. La cuestión es mantener una alimentación saludable durante toda tu vida, no restringir alimentos o calorías de forma extrema, de manera que nos provoque ansiedad y nos acabe afectando de forma negativa, recuperando el peso e incluso incorporando más kilos de los que teníamos al principio. La CLAVE principal es aprender a comer bien siempre, a saber hacer elecciones adecuadas todos los días. A ser conscientes de las cantidades que ingerimos y de la calidad de los alimentos. Si desconoces los nutrientes que tu cuerpo necesita para nutrirse, deberías molestarte en leer e informarte (al final del post encontrarás más info) porque tu salud y tu rendimiento dependen muchísimo de ello.
2. Entrenar y mejorar tu condición física
Además de los entrenamientos de Kendo, es interesante trabajar el cuerpo para mejorar la condición física: practicar actividades cardiovasculares como correr o nadar, trabajar todo el cuerpo con ejercicios de musculación a fin de fortalecer las articulaciones y los músculos, etc. Personalmente, combino mi entrenamiento de Kendo con entrenamiento en el gimnasio por mi cuenta (corro unos 40 minutos 3-4 días a la semana y realizo entrenamiento con pesas) y os aseguro que he mejorado mucho la resistencia y la fuerza en la práctica en Kendo. Ahora rindo mucho mejor, aguanto más, entreno mejor y disfruto más. He pensado desarrollar una entrada a parte tratando este tema en mayor profundidad.
3. Evitar hábitos de vida poco saludables
A mucha gente no le gusta que le recuerden que fumar, beber alcohol, comer comida basura, porquerías azucaradas como bollería industrial, beber bebidas azucaradas («refrescos»), drogarse, etc. empeora a pasos agigantados la calidad de vida y la salud. ¿Crees que emborracharte todos los sábados no afecta a tu rendimiento en Kendo? Te equivocas. De todos modos no digo que haya que ser extremadamente estricto y cerrado, ni que te quedes sin vida social, pero sí que seas consciente de que todo lo que comes o bebes afecta a tu salud (y a tu rendimiento físico/deportivo) para bien o para mal y que a fin de cuentas ser consciente de todo esto a diario se convierte en un estilo de vida, porque estamos siendo constamente «bombardeados» con publicidad y productos que nos incitan a hacer totalmente lo contrario a lo que se consideraría saludable, además de que la oferta (en general) en restaurantes y tiendas suele ser bastante poco saludable.
Mi experiencia personal:
Si he pensado que esto es importante para todos los practicantes de Kendo (y para todas las personas en general) ha sido básicamente porque yo he experimentado una grandísima mejoría al cambiar mi estilo de vida. Por lo general, nunca he llevado un estilo de vida muy malo, a fin de cuentas he hecho ejercicio siempre, salvo alguna temporada concreta, pero es cierto que no siempre he controlado la alimentación y otros hábitos tanto como lo hago ahora. Y es crucial, aunque no lo parezca a primera vista.
Creo que realmente no era consciente y consideraba que algunos de mis hábitos tampoco eran tan malos. Ahora comprendo que estaba equivocada. Me faltaba información, me faltaba conocimiento, como creo que puede estar pasándole a otras personas.
El hecho de haber mejorado mis hábitos, combinado con realizar entrenamiento complementario me ha aportado muy buenos resultados (y todavía estoy en ello).
Por eso he pensado en hacer este post, no para ofender a nadie, ni para tratar de imponer nada a nadie, ni decir que los demás lo hacen mal. Si mi experiencia y lo que aquí os he contado puede servir para que otra persona tome conciencia, mejore su salud, su estilo de vida y en consecuencia mejore su rendimiento en Kendo, ya habrá valido la pena.
Si quieres saber más sobre nutrición y estilo de vida, te recomiendo la sección «Gente Sana» del programa Gente Despierta de Radio Nacional de España, dirigida por Julio Basulto, cuyo blog y libros (que podéis encontrar en bibliotecas) os recomiendo encarecidamente.